Joe Biden: Obama limpio

Sólo que la recomendación viene de demasiado cerca

Por Jorge A. Pomar, Colonia

Pero, tratándose del resultado de una averiguación interna del equipo de Obama, la recomendación viene de demasiado cerca... Hay una pregunta lógica, clave, que hasta ahora casi nadie se ha planteado: si entre las diversas alternativas de soborno mencionadas en las grabaciones por el propio Rod Blagojevich, el corrupto gobernador actualmente en libertad bajo fianza, figuran una embajada y la Secretaría de Sanidad, dos altos cargos que sólo puede asignar el presidente electo en persona, ¿cómo es posible que los seis contactos entre Blago y Emmanuel, el jefe de gabinete designado, no se haya abordado el tema? [Foto: Obama vacilando en Hawai.]

Con Obama de vacaciones en Hawai, Joe Biden es quien ha tenido que dar la cara. Pero el vicepresidente ha comparecido ante la prensa en una breve alocución (pinche aquí para ver el vídeo del Chicago Tribune) cuajada de las mismas vaguedades, evasivas y titubeos característicos de los discursos de su jefe sobre el álgido tema.

El beneficio de la duda entre gentil y socarronamente concedido ayer a Obama por el ex alcalde de Nueva York y ex candidato republicano Rudolf Giuliani, pacificador de Harlem y el Brox (por ende, experto en en asuntos de corrupción) y héroe indiscutible del 11/9 (por ende, autoridad moral urbe y orbe) implica un plazo de gracia que ya, más que correr, vuela. Flota en el aire la turbia sospecha de que justo de eso se trata, de ganar tiempo estirando el explosivo affaire hasta la toma de posesión de Obama el 20 de enero.



Mantener la Caja de Pandora illinoisana lo más herméticamente cerrada posible hasta esa fecha podría ser el objetivo inconfesable del fiscal federal al forzar el aplazamiento de cualquier medida efectiva (impugnación, deposición provisional, etc.) contra Blago, so pretexto de evitar que las palabras de cómplices y testigos pongan en peligro el proceso de instrucción de cargos contra un gobernador que ya es carne de presidio.

¿No será que el bloguero afro "jedi will" (pinche ahí para oírlo) alter ego del Abicú en Harlem, el Bronx o Nueva Orleans, tenía razón cuando en uno de sus irreverentes vídeos en You Tube daba del cuerpo como quien dice dentro del nido al atribuir la extraña cautela del Partido del Elefante (republicanos) al temor a una intifada de consecuencias imprevisibles en los guetos negros? Para empeorar las cosas, masivamente secundada por los frustrados liberals (progres) anglosajones, especula Pomar. Oh, my God!

Fazit: Mientras tanto, la presunción de que el presidente electo haya salido del muladar de Chicago con el plumaje limpio del Ave Fénix o sucio de las taimadas Hurracas Parlanchinas de Walt Disney, no es más que eso, un gran signo de interrogación, una espada de Damocles colgando sobre la cabeza del próximo inquilino demócrata de la Casa Blanca.

Lo que, en cambio, ya va siendo una certeza hasta en la mente de los obamaniacos es que las promesas de transparence y fair play han sido las primeras en quedar tendidas sobre la alfombra inaugural. de la Nueva Era. En cuanto a la palabra CHANGE hace rato que debe escribirse en minúsculas. Y no sé por qué se le antoja al Abicú que, visto que él mismo se ha cerrado casi todo el margen de juego a la izquierda del dominó doméstico y geopolítico, el embargo va quedando como una las pocas fichas disponibles con que el primer presidente negro del "Imperio" dé un buen golpe de efecto en la arena internacional...