Sunday, 22 March 2009

"La reconciliación con Obama según Irán"

Una caricatura de Pong para el Guiness de la Iconoclasia

Por Jorge A. Pomar, Colonia

¡Original sin antecedentes en los anales de la caricatura sacrílega, Pong! No creo que ningún otro artista del género en el orbe haya captado mejor el quid, la clave para descifrar la ecuación islamofascista. A saber, que en esencia la llamada "guerra santa" de Bin Laden, Al Qaeda, Hizbolá, los ayatolás iraníes, etc., no es más que una de los tantas réplicas tercermundistas del sadomasoquismo occidental.

Lo que, no ya Obama sino ni siquiera su antecesor Bush, el "Gran Villano de la Aldea Global", acaban de meterse en la mollera es la obviedad de que la fobia planetaria contra Estados Unidos tiene mucho más que ver con los incomparables aciertos civilizatorios del
American Way of Life que con sus errores, sean éstos reales o imaginarios. La obsesión antiamericana consta de dos vertientes originarias: (1) el resentimiento de una Europa inconsolable que en el siglo XX perdió su hegemonía universal a manos de Estados Unidos (2) las sucesivas derrotas del fascismo y el comunismo, dos fenómenos populares netamente europeos, a manos del mismo país.

Para más inri, se da la tiple circunstancia agravante de que, en última instancia, este Viejo Continente en irreversible decadencia aún vive bajo el paraguas protector de la Casa Blanca, encarnando a un estado del bienestar igualmente en franca decadencia. No obstante, sigue ejerciendo una influencia mediática decisiva sobre la opinión pública internacional que le permite venderle como pan caliente al Tercer Mundo, por el carril uno, un modelo socialdemócrata en crisis aguda.



(Y por el carril dos, anacrónico pero aún vigente, la alternativa antisistema. Cualquier cosa menos los tabúes de la democracia representativa y el mercado libre. De ahí que en todo el espectro de centro-izquierda eurooccidental, y prácticamente en ninguna de las antiguas colonias europeas, exista la menor simpatía con la oposición liberal cubana. Casi todos son, de un modo u otro, por una u otra causa, más bien aliados del Palacio de la Revolución, con el cual comulgan en la ONU y el resto de los foros internacionales.)

No en balde el creciente desencanto comunitario se da de la mano con el desdén a vuelta de correo del ayatolá supremo Alí Jameini al ramo de olivo del Mesías Negro: "Hechos no sólo palabras". Penúltima perla previsible de un rosario de repelucos foráneos contra el
change we can believe in que abarcan desde el Gorila Rojo, Fidel-Raúl Castro y Bin Laden hasta Kim Jong II, Putin-Medvédev y Felipe Calderón (México declaró la guerra aranceles al vecino del Norte).

Nada contradictorio en este sentido, desde luego, el dato de que el mandatario europeo más despelotado con el new deal del Black Roosevelt (y las reformas cangrejeras de Raúl Castro) sea el socialista Rodríguez Zapatero, cuya inefable ministra de Indefensión no se ha tomado la molestia de avisar a sus colegas antes de trasladar al tercio táctico del semipacificado Kosovo (no se ve de qué modo estén a la ofensiva esos victoriosos talibanes) al supuestamente indómito Afaganistán.

Que a despecho de la distancia geocultural se trata de procesos gemelares de inspiración occidental nos lo demuestra cierta conspicua semejanza --pasada por alto hasta la fecha por la historiografía comparativa-- entre el triunfo del barbudo Fidel bajo el signo de la cruz contra el demonizado Fulgencio Batista en el 59 y el del no menos barbado, devoto y siniestro imam Ruholá Jomeini contra el satanizado Sha Reza Pahlevi veinte años más tarde: con la abierta parcialidad primero y el aplauso delirante de Occidente y sus izquierdas después, ambas rebambarámbanas dieron al traste con sendas dictaduras prooccidentales para instaurar, respectivamente, el marxismo-leninismo en la Isla y la sharía en Persia.

Diferencias: en Irán se ejecuta (excomulga, mutila, lapida, ahorca, fusila) y reza más el catecismo oficial; en cambio, hay más comida (cero racionamiento), ropa y acceso a Internet, además de menos controles aduanales. En ambas satrapías la juventud sueña despierta con largarse en masa a Occidente, preferentemente a Estados Unidos.

Similar balance en dos países disímiles en todo menos en prosperidad y tolerancia prerrevolucionarias: fanatismo, represión, miseria, desesperanza, éxodo masivo y solidaridad occidental. Cuba e Irán, aliados por un pacto de tirria común contra Occidente y su paradigma americano. "Dios los junta y el Diablo los cría".

En fin, prodigios macabros de neta factura occidental en el mimético Tercer Mundo. Pero dejemos ahí las curiosidades históricas del azar concurrente para ocuparnos de una excentricidad geopolítica de candente actualidad que mancomuna el destino del aprendiz de magia negra de la Casa Blanca con el de nuestros impotentes paisanos en Cuba.

Hablo del proyecto ruso-cubano (Chávez brinda una isla virgen entera, pero la antigua base soviética de espionaje radioelectrónico de Lourdes en Bejucal dispone de cuatro pistas adecuadas) de usar por segunda vez a nuestro país como portaviones insumergible para los vuelos "de amistad y colaboración" de los bombarderos estratégicos de Putin-Medvedev.



Dislate geopolítico que, amén de echar por tierra de antemano los rooseveltianos planes de Good Neighborhood de Obama, podría desatar una nueva Crisis de Octubre de desenlace imprevisible. Bastaría con que se estrellara al aterrizar uno de esos supersónicos cargados de ojivas radiactivas y... "¡Adiós, mundo cruel!" A la inminente eventualidad de la solución biológica, se añadiría a corto plazo la de la hecatombe einsteiniana...

Con ese otro trueno a la vista en el horizonte, quién duerme sin pesadillas. Puede que, en efecto, los optimistas de ambas orillas del estrecho de la Florida estén en lo cierto y la festinada renuclearización del Caribe no sea más que un simulacro del Kremlin para espantar a los americanos de Europa Oriental y del Cáucaso, pero la noticia en sí no deja de revelar los extremos a que es capaz de llegar el Palacio de la Revolución en su desideologizado afán de sobrevida.

Por lo demás, no huelga recordar que ya en el 62 los expertos estuvieron poniendo en duda la presencia de los cohetes de Nikita hasta que un par de fotos aéreas de los emplazamientos mostradas por el embajador americano en la ONU encendieron todas las luces rojas. Como se dice en el argot criollo, "nos salvamos en tablita".

Grita al cielo, por ende, el silencio al respecto de Washington y Bruselas, por un lado, y de nuestros apóstoles del diálogo y la reconciliación nacional a ultranza, tan fascinados por las migajas del panqué humanitario obamita que hasta el momento ni siquiera se han tomado la molestia de introducir ese dato atómico en su errática ecuación altermundista del
Yes we can. Así de tozudos y desaprensivos son...

[Nota bene: Además de los guías espirituales de Irán y Cuba, otro déspota que ha calado bien a Obama es el histrión de Hugo Chávez quien, excepcionalmente dentro de su habitual lunatismo escénico acaba de trazarle a mano alzada el mejor minirretrato abstracto de que se tenga noticia desde su investidura el pasado 20 de enero: "...pobre ignorante, que estudie, que lea un poco para que aprenda cuál es la realidad de lo que está viviendo y la realidad de América Latina y la realidad del mundo". Sólo falta el hula-hula en la cintura de este hijo predilecto de Honolulu.]



Ojala que esta vez, adaptando aquel "¡Nikita, Nikita, mariquita, lo que se da no se quita!", no llegue a corearse en la Plaza de la Revolución este estribillo: "¡Putin, hijo de puta, lo que se da no se disputa!"

O tal vez sí, porque significaría que Putin --a semejanza de Jruchov-- se lo pensó mejor a última hora, suspendiendo los vuelos sin consultar al Magno Paciente y/o al Hermanísimo. El riesgo estriba en que Obama no es Kennedy...

3 comments:

Unknown said...

¡Hola, chico!
Entré a ver tu blog y llevo un buen rato leyéndolo. Gracias por el enlace y te diré que me estoy cultivando mucho en cuestiones de política con los blogueros. A partir de ahora vendré más por aquí..fajá o con ropita coordinada.
¡Gracias por todo! Y muy buenos tus videos y las fotos...

Eufrates del Valle said...

Acertadisimo. Y abicuisimo. Como debe ser cuando se le dice al pan, pan, y al vino, vino.

Lastima que el tema trata de cosas terrenales y no de pan y vino, como es volver a convertir nuestra Isla en un porta-cohetes.

La ilustracion de Pong es priceless!

Zoé Valdés said...

De vino no, nada, que dicen ellos que no beben, aunque cogen unas curdas escondidos de Alá, que pa qué... El video de las lapidaciones es duro, pero hay que verlo... En cuanto al texto, claro, directo al pulmón, tal como hay que decir las cosas.